Los trabajadores de la Refinería de petróleo Hermanos Díaz, de esta ciudad, recordarán el próximo día 29 los 60 años de la intervención por el gobierno revolucionario de la empresa The Texas Company, subsidiaria en Cuba del monopolio Texaco, ante la negativa para refinar el crudo procedente de la antigua Unión Soviética.
Poco tiempo después, el seis de agosto del propio año 1960, fue nacionalizada, pasando a manos del pueblo, y se honró con el nombre de Emiliano y Carlos Manuel Díaz, unidos por la sangre y los ideales, quienes entregaron sus vidas en las luchas contra la dictasdura de Fulgencio Batista, siendo aún muy jóvenes.
En ocasión de las seis décadas de la intervención se realizará un matutino especial, momento en que se repasará ese hecho para el conocimiento de las nuevas generaciones que allí laboran y serán reconocidos trabajadores con más años de servicios en esa importante industria.
Precisamente la Refinería de Petróleo Hermanos Díaz tuvo el privilegio de elegir un delegado directo al XI Congreso de la Unión de Jóvenes Comunistas, honor que recayó en Wilfredo Valdés Pérez, especialista del departamento de control de la calidad.
Aunque el evento fue suspendido por la enfermedad Covid-19, para Wilfredo constituyó un orgullo, ya que lleva casi cinco en ese centro, luego de graduarse de Licenciado en Química.
Sabe él a la hora que llega a su puesto de trabajo pero no a la que se marcha, por tener una responsabilidad en el laboratorio de ensayos a combustibles.
Sus compañeros aseguran que es muy serio en su trabajo y, sobre todo, exigente en la tarea que ocupa y como secretario general del Comité UJC.
La refinería santiaguera atiende la demanda de las provincias orientales y Camagüey, en productos como gas licuado de petróleo, solventes, naftas, gasolinas, diésel, gasoil de vacío, petróleo combustible y cemento asfáltico.
Ante las carencias de partes y piezas en su equipamiento por el bloqueo económico, comercial y financiero de los Estados Unidos contra la Isla, los innovadores y racionalizadores se crecen en la búsqueda de soluciones para no detener su producción.
Fuente: Periódico Sierra Maestra
