Más de 400 nacimientos ha asistido el equipo multidisciplinario del hospital ginecobstétrico Tamara Bunke de Santiago de Cuba luego de su reparación capital. Pese al recrudecimiento del bloqueo, velar por la calidad en la asistencia medica de embarazadas, puérperas y el recién nacidos es imprescindible para el colectivo laboral que busca obtener mejores resultados en el programa materno infantil en el territorio.
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